Electra Metrópolis, «un restaurante con vistas» en Atenas
Seguramente el lector se acuerde de esa famosa película llamada “Una habitación con vistas”, basada en la novela homónima del escritor E. M. Forster. Un film, que describe una historia de amor, cuyo escenario es esa preciosa ciudad italiana, considerada por muchos, una de las más bellas urbes del mundo.
Pues bien, me vino a la mente el título de esta película en la ciudad de Atenas. Concretamente, en la terraza del restaurante del Hotel Electra Metrópolis (www.electrahotels.gr). “Un restaurante con vistas”
Eran aproximadamente las siete de la mañana cuando me disponía a desayunar en este formidable alojamiento, situado muy cerca de la céntrica plaza Síntagma, en pleno corazón urbano ateniense. En su último piso se encuentra el restaurante donde, me dicen, tienen ya abierto un desayuno buffet desde primera hora. Hay que coger fuerzas porque me espera un atareado día recorriendo la capital griega. Quiero ver todo lo que pueda y los dos días que tengo prometen ser intensos.
Aunque había amanecido hace poco tiempo y el sol no brillaba aún con toda su intensidad, las vistas que regalaba el último piso de este hotel eran impresionantes. Más aún cuando, nada más salir del ascensor y entrar en el restaurante (rodeado de grandes ventanales que permiten unas panorámicas únicas) descubro frente a mí la imponente imagen de la Acrópolis ateniense.
Imposible tener, en esos momentos, mejores panorámicas. Un sueño hecho realidad. Por primera vez, ante mí tengo la milenaria Acrópolis y lo hago desde este magnífico promontorio artificial que es la terraza del Electra Metrópolis. Todo un lujo y una imagen que permanecerá imborrable por mucho tiempo en mi memoria.
Pero este espacio, además de contar con los magníficos fogones de su restaurante, puede presumir con otro aliciente más: su piscina. Tipo infinity, a la vez de disfrutar de un relajante baño, se convierte en otro mirador sin igual. En ese caso, hacia la colina de Licabelo, el punto más alto de la ciudad.
Así pues, casi trescientos sesenta grados desde los que se domina prácticamente todo Atenas. No es de extrañar que muchas personas, no sólo huéspedes de este cinco estrellas, se acerquen hasta aquí para disfrutar de una cena inolvidable o para tomar un café con los amigos en un entorno muy especial.
Me gustó tanto este lugar que hice varias fotos en diferentes horas del día. Una de ellas es la que preside estos párrafos.
Últimamente, en Atenas se están inaugurando nuevos hoteles de altísima calidad que están mejorando y ampliando su capacidad hotelera. Hotel Electra Metrópolis, es un ejemplo de ello. Una apuesta por la calidad que lo posiciona como uno de los alojamientos a tener en cuenta. Confort, comodidad, atención personalizada, inmejorables instalaciones, gusto por el detalle y perfectamente ubicado es ya, a pesar del poco tiempo que lleva en funcionamiento, una referencia. Toda una experiencia que quiero repetir.
Fuente: http://ow.ly/awzM305PkPt
Categoría: OCIO Jueves 3 de Noviembre del 2016
Belchite, el embrujo de un pueblo fantasma
Pueblo Viejo de Belchite, ya no te rondan zagales, ya no se oirán las jotas que cantaban nuestros padres». Éste fue el triste mensaje de despedida que Natalio Baquero, uno de sus últimos habitantes, dejó escrito en la puerta de la iglesia de San Martín de Tours el mismo día de su partida. Belchite se convertía en pueblo fantasma.
Apenas 50 kilómetros separan Belchite de la capital, Zaragoza. Y esa cercanía fue su perdición: entre el 24 de agosto y el 6 de septiembre de 1937, las tropas republicanas asediaron sin tregua alguna a Belchite hasta lograr su conquista. La pequeña y próspera población (con 3.800 habitantes y 1.200 casas) había sido declarada objetivo estratégico para elevar la moral de las tropas del Frente de Aragón antes de su ofensiva para tomar Zaragoza. Bajo el sofocante calor del estío aragonés y un intenso bombardeo, sin apenas agua ni alimentos, luchando metro a metro y casa por casa, los catorce interminables días que duró la contienda se saldaron con la escalofriante cifra de casi 6.000 víctimas, entre civiles y militares de ambos bandos, y un pueblo casi en ruinas. Sin saberlo aún, Belchite había sufrido una de las más cruentas batallas de la Guerra Civil y sus calles quedaron convertidas en un escenario dantesco, un esperpéntico reflejo de la bella población que, hasta entonces, había sido.
El lugar quedó como cuartel de las Brigadas Internacionales hasta que siete meses después fue tomado por el ejercito franquista, de nuevo con un alto coste de sangre y bombas.
Finalizada la guerra, pese al juramento de Franco («Yo os juro que sobre estas ruinas se edificará una ciudad hermosa y amplia, como homenaje a su heroísmo sin par»), Belchite nunca fue reconstruida. A cambio, un nuevo Belchite, ni tan amplio ni tan hermoso, empezó a crecer al lado de esas ruinas.
Muchos de los vecinos, desoyendo las órdenes, siguieron viviendo en el hogar de su vida hasta que en 1964, Belchite quedó totalmente abandonado, convertido en pueblo fantasma. Y ahí comenzó la segunda oleada desastrosa para Belchite: al vandalismo de algunos visitantes se sumó la indiferencia de las Administraciones ante el vergonzoso expolio de todo lo poco y bueno que aquí quedaba.
Hasta hace pocos años se podía visitar el pueblo viejo a cualquier hora y sin control alguno; ahora eso ha cambiado y el recinto se encuentra vallado y sólo se puede acceder a él durante unos horarios establecidos para visitas organizadas en grupos guiados. En las visitas diurnas (6 euros), son los descendientes de los propios vecinos que habitaron el pueblo los que se encargan de guiar a los grupos y explicar lo que allí ocurrió, basándose en testimonios de primera mano de supervivientes y en la documentación oficial de ambos ejércitos. Por la noche (10 euros o 12 si es entrada combinada día/noche), la visita se viste de riguroso misterio: los guías cuentan el lado más tenebroso, las leyendas y algunos de los muchos fenómenos paranormales que aquí se han registrado.
Creamos o no estas historias, lo cierto es que recorrer las calles del pueblo viejo por la noche es una experiencia que provoca escalofríos... sobre todo en noches especialmente mágicas como San Juan o Todos los Santos.
Para acabar de comprender el horror y crueldad de la batalla de Belchite conviene realizar la «Ruta de las Trincheras», un recorrido por algunos de los más importantes emplazamientos militares de ambos bandos, como «Cabezo del Lobo» o el «Campo de Rusia». Más informaciónen las páginas web www.campodebelchite.com y en www.belchite.es.
De visita a la cuna de un genio
El 30 de marzo de 1746 nació Francisco de Goya en Fuendetodos, a escasos 20 kilómetros del pueblo de Belchite. Su casa natal fue identificada en 1913 por el pintor Ignacio Zuloaga, una vivienda de tres plantas construida con el estilo rústico del siglo XVIII. La casa se puede visitar y así descubrir los orígenes humildes del genio de la pintura. A su lado se encuentra la Sala Zuloaga, destinada a exposiciones temporales de artistas consagrados como Picasso, Miró, Saura o Chillida. Con la misma entrada (3 euros) se pueden visitar ambas estancias y, además, adentrarse en el Museo del Grabado que alberga las cuatro series de esta técnica con las que Goya habría pasado a la historia, incluso sin haber pintado nada más: Los Caprichos, Los Desastres, La Tauromaquia y Los Disparates.
Fuente: http://ow.ly/ZfG7305PklY
Categoría: OCIO Jueves 3 de Noviembre del 2016
Pazo Baion, el mejor rincón enoturístico de España
Pazo Baion, en Pontevedra
Pazo Baion acaba de obtener el premio al Mejor Rincón Enoturístico de España, otorgado por Acevin (Asociación Española de Ciudades del Vino). La finca fue propiedad en su día del narcotraficante Laureano Oubiña y en la actualidad de la cooperativa de vinos Condes de Albarei, que la adquirió en concurso público después de quedar integrada en 2006 en el Fondo de Bienes Decomisados del Estado. Condes de Albarei se alzó con la propiedad del Pazo en 2008 tras presentar una oferta de 15 millones de euros y con el añadido de «importantes compromisos sociales que la organización adquiriría al hacerse con esta propiedad: destinar anualmente un mínimo de 400 jornadas de trabajo para drogodependientes en proceso de reinserción social y destinar un 5% de la facturación anual a programas de prevención y reinserción de drogodependencias, gestionados a través del Ministerio de Sanidad».
La cooperativa tuvo como primera necesidad acometer la construcción de una nueva bodega, en la zona antigua de la vaquería, y a partir de ese instante dar el impulso necesario a un proyecto enoturístico de gran calado y que aún no ha culminado. La reforma arquitectónica quedó en manos de César Portela, premio Nacional de Arquitectura e insigne arquitecto gallego. En la actuación se conservaron todos los valores existentes de tipo histórico, ambiental, botánico, paisajístico, y, sobre todo, productivo, existentes en el conjunto. También la vaquería se convirtió en el Centro de Visitas, destinado al equipamiento sociocultural y recreativo relacionado con la exposición, degustación y venta de vino. Alberga también espacios complementarios de este uso, así como oficinas y salas de cata y conferencias. En el ala este del edificio se sitúa la antigua Casa de los Caseros, lugar en principio destinado a un pequeño hotel con encanto que está previsto ahora desplazar al propio Pazo. Y El Palomar, magnífico ejemplo de construcción y reformado hasta el mínimo detalle, se dedica en ocasiones especiales a Sala de Catas.
Pazo Baion, espacio en el que se elabora el vino Pazo Baion, uno de los grandes blancos de Rias Baixas, se encuentra en Baión-Villanueva de Arosa, en la provincia de Pontevedra.
Además, otros de los galardones concedidos por Acevin son los siguientes. Mejor Iniciativa Enoturísitca: Proyecto de recuperación de bodegas y lagares tradiciones del Ayuntamiento de Moradillo de Roa (D.O. Ribera del Duero). Mejor Campaña de Promoción: Ruta del Vino y el Brandy del Marco de Jerez. Mejor municipio enoturístico: Laguardia (Álava). Mejor bodega abierta al turismo: Bodegas David Moreno (D.O.C. Rioja). Mejor alojamiento enoturístico: Concejo Hospedería (D.O. Cigales). Mejor Experiencia Enoturística: Fiesta del pisado de uva de Bodegas Lecea (D.O.C. Rioja).
Fuente: http://ow.ly/bFfK305Bace
Categoría: OCIO Jueves 27 de Octubre del 2016
Tres planes antilluvia para disfrutar del fin de semana en Madrid
Existe un Madrid con rincones inéditos. Algunos de ellos están de estreno... y otros de reestreno. Los que puedes explorar aun cuando la previsión meteorológica para el fin de semana pinta de todo menos halagüeña. Planes para caminar (o cantar) bajo la lluvia y capear el temporal en clave ociosa. Locales de nuevo cuño que transitan entre una galería de arte, la reapertura de una mítica sala capitalina o una tienda con mucho encanto ‘boho’. Cálzate las botas de agua y el chubasquero y no dejes que la lluvia sea, precisamente, aquello que te agüe la fiesta.
1. Una exposición con rostro de mujer
La recién inaugurada galería Échale Guindas Art&Shop es un espacio aséptico, pero con un halo acogedor que define sus tres salas. Quienes regentan este nuevo local, María y Laura, han dado con este espacio en uno de los barrios más señeros de la capital que ha servido a su vez de lienzo en blanco para que la ilustradora Mari Quiñonero (Murcia, 1979) estrene y exponga 'Treinta'. En esta colección, compuesta por 30 piezas, la artista juega con los pliegues, los colores y las texturas de su particular chica del turbante.
Una exposición que marca no solo la apertura de esta galería en Madrid, sino un nuevo reto en la trayectoria de Quiñonero, quien se emplea a fondo en jugar con las composiciones e ironizar con sus mensajes (cuya protagonista es siempre una mujer).
La chica del turbante de la exposición 'Treinta', de Mari Quiñonero (Foto: Échale Guindas)
Además, para 'Treinta', la ilustradora murciana ha contado con el apoyo de firmas como Levi’s, Zubi Design o Steve Mono, quienes han cedido parte de los tejidos que componen esta sencilla –a la par que preciosista– colección de cuadros.
Dónde: en calle Pelayo, 47.
Cuándo: de martes a viernes (de 12.00 a 15.00 h y de 17.00 a 20.30 h) y sábados (de 11.30 a 20.30 h).
2. Para dandis con alma 'boho'
El cuidado por la calidad y el mimo por la imagen son los mantras que se repite Juan Calvente, socio fundador y director creativo de Edmmond, desde que en 2014 se embarcara en la creación de una colección de camisetas para una marca que acaba de inaugurar su primera tienda en Madrid.
Ahora, dos años después, los amantes del surf, el motor y la música encontrarán en este local un paraíso textil donde adquirir algunos de sus imprescindibles para este otoño-invierno. Una tienda en la que, bajo el auspicio de una suerte de casco de barco deconstruido, alberga sudaderas, zapatillas, camisas o jerséis con un punto ‘boho chic’ para el hombre que busca marcar la diferencia.
Imagen del interior de la nueva tienda en la calle Claudio Coello (Foto: Edmmond)
Hierro, muebles de madera en tonos claros y paredes revestidas con molduras hacen de este espacio todo un ‘loft’ con encanto que debe visitar el ‘dandy’ contemporáneo. Y si ni la lluvia te lleva a dar un respingo desde el sofá y visitar esta tienda, prueba con su ‘shop online’. Lo tienen todo.
Dónde: en calle Claudio Coello, 21.
3. Come, merienda, baila
Si Ava Gardner se divertía en sus fiestas o Lola Flores perdió el pendiente en su escenario durante una actuación, visitar el Florida Retiro –reabierto hace escasas tres semanas– se convierte en un plan de obligado cumplimiento. La célebre sala se ha convertido en un rincón con varios espacios cuyo interiorismo y arquitectura tienen el sello de Pascua Ortega y Guille García-Hoz respectivamente.
Interior de El Pabellón, restaurante de Florida Retiro (Cortesía)
Esta mítica sala de fiestas, antaño pabellón de caza del rey Fernando VII, pasa a convertirse en un lugar de referencia para todos aquellos que busquen altas dosis de cultura, ocio, espectáculo y, cómo no, gastronomía.
Florida Retiro cuenta con un restaurante –El Pabellón– de cuya barra central, presidida por un árbol, parte un espacio con vistas al célebre parque madrileño. En él es posible disfrutar de sus decenas de recetas de cocina urbana confeccionadas por el chef Joaquín Felipe.
También posee un bar de tapas –La Galería– en el que es posible probar las raciones más tradicionales con un giro al recetario capitalino. A él se suma una terraza –ideal para tomar el primer cóctel vespertino– donde degustar su amplia oferta de ceviches, sushis, sashimis o algún que otro plato de inspiración 'thai'.
Pero la joya de la corona es La Sala. Sí, ese lugar en el que José María Íñigo o Concha Velasco presentaron algunos de sus célebres ‘shows’ televisivos. Ahora, durante los viernes y sábados, la compañía teatral Yllana pisa las tablas de su escenario con ‘Pandora Nights’: una cena-espectáculo que hace posible disfrutar de música y gastronomía en un mismo espacio.
La Sala, el lugar donde gastronomía y espectáculo se dan la mano (Cortesía)
Dónde: en calle Paseo República de Panamá, 1 (Parque del Retiro).
Cuándo: espectáculo ‘Pandora Nights’ (viernes y sábado de 21.00 a 00.30h).
Fuente: http://ow.ly/F8Fx305B9Wi
Categoría: OCIO Jueves 27 de Octubre del 2016
Toda la esencia de Aveyron en diez paradas obligatorias
El agropastoralismo tiene como eje al pastor. Este oficio, que hunde sus raíces en el mismo origen del hombre y que ha desaparecido en buena parte del mundo, sigue latiendo con fuerza en el corazón de Causses y Cévennes, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Este hombre paciente, alejado del lujo y de eso que llaman redes sociales, atesora un alto grado de sabiduría campestre y lo pone en práctica con su mejor patrimonio: su rebaño de ovejas.
En el departamento francés de Aveyron, el territorio y sus habitantes forman una unión indivisible porque se basa en el respeto y en el cuidado mutuo. Gracias a este savoir-faire, seguimos degustando quesos exquisitos, vistiéndonos con accesorios de piel hechos artesanalmente o deleitándonos la mirada con la naturaleza en estado puro o aportaciones más modernas como el viaducto de Millau.
La Couvertoirade
Este recinto medieval tiene el honor de ser uno de los pueblos más bonitos de Francia. Sus intrincadas callejuelas trasladan al turista a la época de los templarios y de los hospitalarios, responsables de muchas de las estructuras que han desafiado el paso del tiempo. Los cardos en las puertas, que hoy han quedado como adorno vintage, antaño ejercían la función de un barómetro: cerrado ante la lluvia y abierto al salir el sol.
Con una media de más de 100.000 visitantes al año, la población oficial de La Couvertoirade apenas es de 25 personas; unas reciben a los turistas que acuden fuera de la temporada alta y otras siguen dedicadas en cuerpo y alma a las tareas propias del campesino. Cuando llega el verano, la población se incrementa hasta los 75 lugareños, que buscan una segunda residencia de aire rural.
Relacionado: Quince de los pueblos amurallados más bellos de España.
Fuente: http://ow.ly/fXlr305B9Kd
Categoría: OCIO Jueves 27 de Octubre del 2016